Comisiones Obreras Canarias | 18 abril 2024.

El calor en el trabajo puede provocar daños importantes a la salud

  • Se aproxima una ola de calor y con ella, el riesgo a golpes de calor en el trabajo
  • La Inspección de trabajo debe vigilar a las empresas para que cumplan las medidas preventivas que eviten muertes en el trabajo

11/08/2021.
Fuente: AEMET

Fuente: AEMET

Otra ola de calor y otra vez el peligro estival de trabajadores y trabajadoras de sufrir golpes de calor. Una de las consecuencias más palpables del cambio climático son los extremos atmosféricos, entre ellos que la temperatura media anual no deja de subir. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha alertado de altas temperaturas desde este mismo viernes 13 de agosto hasta el próximo lunes. Por tal motivo, CCOO Canarias advierte a las empresas de la necesidad de tomar medidas efectivas que protejan a todas las personas trabajadoras que están expuestas a estas condiciones.

Multitud de trabajos que se realizan en el campo, en la playa, en las calles y en centros de trabajo al aire libre como la hostelería, son los afectados por este riesgo laboral, donde las radiaciones inciden directamente. Pero no únicamente, ya que hay lugares de trabajo como los invernaderos donde una combinación de elevada temperatura, alta humedad y ritmo acelerado de trabajo, puede ser letal para el cuerpo humano, aunque estén cubiertos y eviten la exposición directa a los rayos de sol.

Ante cualquier síntoma que pueda desembocar en un golpe de calor, es urgente y necesario parar de trabajar inmediatamente, buscar una sombra, hidratarse bien, refrescarse y descansar, siempre en presencia de algún compañero o compañera que pueda avisar a los servicios de emergencias en caso de no recuperación. Por tanto, hay que parar ante la aparición de cualquier síntomas como: dolor de cabeza y agotamiento; calor, sudoración excesiva y piel seca y enrojecida; aceleración del pulso y de la respiración; dificultad al hablar y confusión; náuseas, vómito, calambres y fiebre.

Antes de llegar a esta situación extrema, existen diversas medidas de control del calor: disponer zonas de sombra, tener agua fresca y abundante, programar los trabajos de mayor carga física en las horas de menos calor, disminución del ritmo de actividad, rotación de tareas, descansos periódicos, incrementando su frecuencia en las horas más calurosas. Además, la empresa tiene que suministrar a todo el personal, equipos de protección individual adecuados: visera, ropa transpirable, crema solar y gafas de sol.

Es obligación de las empresas proteger la salud de trabajadores y trabajadoras, por lo tanto, cumplir las medidas preventivas necesarias para evitar cualquier daño a la salud por altas temperaturas. Las empresas están obligadas a prevenir este tipo de situaciones: evitando el riesgo, contemplando el peligro en sus evaluaciones de riesgos, planificando sus medidas preventivas, formando e informando a todo el personal y cumpliendo con las medidas de prevención indicadas anteriormente para que no se produzca ninguna muerte por golpe de calor.

A sabiendas de esta problemática que se repite cada año, la Inspección de Trabajo ha iniciado una campaña para vigilar la obligatoriedad de las empresas en el cumplimiento de las medidas de prevención contra el riesgo de sufrir un golpe de calor, sobre todo en actividades en las que se pueden alcanzar temperaturas superiores a 32º C, previsible en estos días que siguen. La campaña consiste en un envío masivo de cartas a empresas, responsables de la aplicación de las medidas preventivas, para concienciar del objetivo de proteger a aquellas personas que desempeñan su trabajo en unas condiciones que pueden acabar provocando un golpe de calor. 

Desde CCOO alentamos a la Inspección de Trabajo para que vigile de cerca a las empresas, ya que no basta con recordarles su obligación del cumplimiento de la legislación. Es vital que las actividades laborales que se desarrollan al intemperie, se acondicionen a la ola de calor que se nos viene encima. La Inspección tiene que ser contundente en la detección de infracciones y la aplicación de sanciones correspondientes, tal y como indican en su plan para combatir riesgos de los golpes de calor; no puede quedar en una mera declaración de intenciones cuando hay vidas en peligro.